Santiago de Chile, 16 ago (EFE).- El sindicato de trabajadores del observatorio astronómico ALMA, situado en el norte de Chile, aplazó una huelga que debía comenzar hoy en demanda de mejoras salariales, tras reanudarse las negociaciones con la empresa, dijeron sus dirigentes.
El presidente del sindicato de trabajadores, Víctor González, precisó a Efe que el aplazamiento de la huelga se concretó después que la empresa solicitó un proceso de mediación amparado en el código del trabajo chileno.
El consorcio estadounidense Associated Universities Inc (AUI), que regula legalmente las relaciones laborales de la institución astronómica con sus trabajadores, tiene ahora cinco días para intentar impedir el paro de los funcionarios mediante la presentación de nuevas propuestas.
La relación entre las partes se complicó después que la empresa no accedió a una mejora salarial de un 15 % sobre el IPC (Índice de Precios al Consumidor), entre otras demandas de los trabajadores.
“El problema no fue que no accedieran a la petición del 15 %, sino que la empresa se negó a cualquier aumento. Cero” subrayó el presidente del sindicato.
El pasado martes se llevó a cabo una votación en la que 180 de los 195 trabajadores sindicalizados votaron a favor del paro, después de que las conversaciones iniciadas el pasado uno de julio con el consorcio estadounidense no llegara a buen puerto.
González agregó que si bien el recurso presentado por AUI demuestra un “ánimo para sentarse a negociar”, de no progresar las conversaciones, los trabajadores de ALMA concretarán la huelga.
Explicó además el dirigente que la huelga no es el fin, sino que el último recurso en un proceso de negociaciones que hasta el minuto no han logrado poner de acuerdo a las partes involucradas.
“Si la empresa no acepta nuestra peticiones, la opción de huelga sigue presente”, remarcó.
El observatorio ALMA, que consta de un conjunto de más de 60 antenas que captan señales desde el espacio, está emplazado a cinco mil metro de altitud en el desierto de Atacama, en el Llana de Chajnantor, que en “kunza”, la lengua de los antiguos atacameños, significa “lugar de despegue”.
En este proyecto se agrupan 20 países, procedentes de América, Europa y Asia, y en el mismo se han invertido 1.500 millones de dólares. EFE
